Monday, January 28, 2019

Convencid@ (28/01/2019)

Hebreos 11:1: "La fe demuestra la realidad de lo que esperamos; es la evidencia de las cosas que no podemos ver."

Una de las características que comparten todos los equipos que admiro es que son capaces de ser muy espectaculares. Esto parece ser basado en las cualidades individuales de los jugadores pero mucho más en la fe de lo que cualquiera pudiera pensar. Una vez preguntado acerca del famoso showtime de los Ángeles Lakers, Magic Johnson dijo, "Es mucho más sencillo cuando sabes que cualquiera de los chicos estará al final de los pases, es cuestión de creer que estarán al final de cada pase y jugarás sin mirar, y eso nadie puede pararlo".

Cuando uno llega al Evangelio cree que ser cristiano es un tema de creer, pero creer es una acción vaga, alejada del todo del acto de saber. Y la fe no es una acción basada en creencias sino en evidencias. Es iniciar una acción a pesar de que no veas la posibilidad de un final, o a que ese final sea improbable. Sólo si tengo la certeza de que hay un Dios que me ama puedo iniciar una relación con Él, basada principalmente en el conocimiento certero de que Él existe. Cualquiera puede creer en cosas, pero no todos pueden vivir conforme a lo que no ven, actuando conforme a eso.

Y en ese intervalo de vida en los huecos donde nadie ve a dónde está pasando y quien recibirá ese pase es donde realmente la vida del cristiano es espectacular. Los milagros de Dios ocurren cuando la gente que tiene fe en Él vive con esa certeza en sus obras, no se preocupa cuando tienen que lanzarse al vacío porque saben con certeza que hay algo que lo recogerá, no se preocupan cuando tienen que recoger algo desconocido que cae desde lo alto, porque saben con certeza que quien lo envió, lo hizo con un amor enorme, y saben que sus planes son mejores. Querid@ lector@, pasa del creer, al estar convencid@. Dios os bendiga.

Guillemo Alías - Escuela de seguirazgo

Sunday, January 20, 2019

Un Dios fiel 20/01/2019

Génesis 31:44: "Así que hagamos un pacto tú y yo, y ese pacto será un testimonio de nuestro compromiso."

Imaginad este escenario -Y tú, Juan ¿Tomas a Sara por esposa para amarla, y respetarla, para cuidarla en la salud y en la enfermedad, en la pobreza y en la riqueza hasta que la muerte os separe... O un día no te sientas con ganas?- yo no sé tú, pero si yo soy Sara, o Juan, ese día no accedo a la cláusula final. El compromiso es la cualidad más determinante para el éxito del ser humano, personal o colectivamente. Nadie, por más inteligencia o fuerza que pueda tener, carisma o encanto, puede lograr nada a menos que se levante cada día con la mente enfocada a seguir empujando sus sueños.

Y el compromiso no es relativo, en una relación no podemos tener poco compromiso, o un "compromiso abierto", o nos comprometemos o no. Por eso, las faltas de compromiso son las faltas más grandes en la pareja y la causa de ruptura más traumática. El compromiso se tiene sin ganas o con ganas, una boda no es un compromiso, la boda es el pacto que, como en el versiculo de hoy, da testimonio de un compromiso. El compromiso es la actitud del corazón de amar algo o a alguien cuando me apetezca y cuando no, este frío o caliente.

Si eres comprometido con las cosas lo serás con Dios pero si no lo eres con Dios no puedes serlo con las cosas. El compromiso con Dios no puede ser condicionado a sí "siento" o no algo en mi corazón, no puede ser condicionado. El compromiso es algo para ser cumplido, no en los días buenos, sino en los días difíciles. Vas a orar con Dios porque le amas, no porque si no, no te da milagros, vas a adorar en la pena más oscura, esa es la adoración pura. Servirás el día que estés lesionado o herido, leerás la Biblia en cansancio. Porque eso es el compromiso que Dios tiene con nosotros, morir en una cruz no fue apetecible (Jn 3:16). Hermanit@, ¿Que compromiso vas a hacer? Dios te bendiga.

Guillermo Alías - Escuela de seguirazgo

Sunday, January 13, 2019

En la presencia 14/01/2019

Isaías 26:17: "Como la mujer embarazada se retuerce y grita de dolor mientras da a luz, así estábamos en tu presencia, Señor."

Cuando uno llega a un trabajo nuevo siempre tiene un poco de miedo al jefe. Es normal, te tienen a prueba y él es la persona a quién debes convencer de tu inexorable importancia para la actividad de la empresa. Yo empecé hace un año en mi actual club de baloncesto como entrenador. Y allí que tuve que convencer a mi jefe, un hombre mayor que se llama Jesús, de que yo era el mejor entrenador del mundo para sus equipos. Al principio verlo llegar por los entrenamientos era algo terrorífico... ¿Estara observando? ¿Vendrá a reñirme? Pero la realidad era siempre otra.

Un día, tuve un conflicto con un padre, esto siempre puede ocurrirte. Y ante esta situación estaba muy estresado, pero Jesús llamó al padre y sacó la cara por mi, tanto que me extrañó y fui a hablar con él, su frase final fue: Guille, yo no sé lo que el resto del club habla de ti, pero creo que eres un crack, y confío en ti. Él me restauró en mi dignidad como entrenador, y desde entonces fue un padre deportivo para mí, ya su llegada no era terrorífica, como en Óseas 6:2: "Dentro de poco tiempo él nos restaurará, para que podamos vivir en su presencia."

Lo cierto es que la presencia de Dios es muy fuerte en las primeras ocasiones en que Él te bautiza. Pudiera ser que sintieras, yo lo he sentido, que puedes morir... Pero Dios te restaura para poder darte esa relación. Y llega el momento en que Salmos 31:20 se hace vivo en tu vida y, parafraseando, "Los escondes en el refugio de tu presencia, a salvo de los que conspiran contra ellos. Los proteges en tu presencia, los alejas de las lenguas acusadoras." Pasando a ser la presencia de Dios el mejor refugio del que no queremos salir. Lucha por no salir de su presencia, lectores queridos, que Dios os bendiga.

Guillermo Alías - Escuela de Seguirazgo

Monday, January 7, 2019

Poquito a poquito 7/1/2019

Lucas 5:16: "Pero {con frecuencia} El se retiraba a lugares solitarios y oraba."

Imagina que eres una persona muy creativa y con grandes planes en la cabeza, y tienes preparado siempre nuevas ideas a desarrollar. Yo soy así, si en una empresa me dieran el trabajo de diseñador de estrategias y nuevos productos sería muy feliz pensando todo el día. El problema viene cuando uno no tiene la disciplina suficiente para seguir desarrollando una idea brillante que le vino a la cabeza, entonces la idea puede ser la mejor del mundo, pero seguirá siendo sólo una idea. El mundo no es cambiado por las ideas, el mundo es cambiado por los hechos y trabajos que resultan de las ideas.

Y para poder desarrollar cualquier cosa es necesario tener una alta capacidad de disciplina con uno mismo. Ponerse hábitos no es fácil pero es el camino hacia el éxito en la vida, y más aún, en la eternidad. Igual que uno no puede esperar tener ganas de hacer cosas por su espos@ e hij@s todos los días de su vida para hacerlas, no podemos esperar a que nos fluyan las ganas de estar con el Espíritu Santo, de orar, o de servir para hacerlo, tenemos que desarrollar una estrategia de hábitos para que nuestras buenas intenciones con Papá se conviertan en actos, los días en los que nos apetezca y en los que no.

En hebreos 5:14 dice: "Pero el alimento sólido es para los adultos, los cuales por la práctica tienen los sentidos ejercitados para discernir el bien y el mal." Por la práctica discernimos, no por ciencia infusa, y ni siquiera por la unción o gracia del Espíritu Santo. La lección de hoy es EMPIEZA POCO A POCO, Jesús se apartaba para orar, para cultivar su relación con Papá. Despierta sólo quince minutos antes para orar, lee tan solo un capítulo diario de la Biblia al principio, obligate unos días y haz el hábito, porque por continua repetición se hará parte de tu vida. Qué bueno es volver a escribiros, lectores míos, que Dios os bendiga.

Guillermo Alías - Escuela de Seguirazgo